Un fiel reflejo de la personalidad del Mediterráneo

Puerto Alicante Shiraz en la etapa visual, nos recibe con un color marcado por su matiz rosado intenso, el corazón rojo cereza picota y de capa media.

En una primera fase olfativa, con el vino a copa parada, nos ofrece toda una gama de agradables aromas, de buena calidad y de una intensidad moderada. De inicio los que apreciamos son primarios, de carácter frutal con recuerdos de fruta roja madura, concretamente la fresa, el cassis y la mora silvestre, todos ellos acompañados de unas tímidas notas florales con la violeta de protagonista. Y sobre un fondo ligero de aromas propios de la crianza, de carácter especiado como la pimienta  blanca molida, recuerdos de cacao y tabaco, pero todos ellos de duración media.

En una segunda impresión olfativa, con la copa agitada y el vino más oxigenado, se nos presenta alegre y extrovertido, con una calidad notable e intenso. En un primer momento destacan todos los aromas descritos anteriormente en la primera impresión; las frutas rojas, las violetas, etc.… reforzados por la oxigenación, y a los que se  suman los aromas terciarios propios de su estancia de siete meses en barrica, que a diferencia de su timidez en la anterior fase olfativa, ahora se nos exhiben con valentía. Los aromas de carácter empireumático con las notas de tabaco, los especiados con el cacao y la pimienta blanca molida. Pero poco a poco, afloran otra serie de aromas, en este caso algunos primarios, con fragancias de hierbabuena y florales con  la violeta ya mencionada, que en un último suspiro aporta toda su frescura. Todo ello en un agradable espacio de tiempo.

En nuestra cata gustativa, se ofrece seco, con un paso por boca sedoso, la acidez equilibrada, con una potencia alcohólica muy débil, de volumen delgado, y con unos taninos presentes y equilibrados, pero quizás faltos de personalidad.

El retro nasal destaca por su intensidad media, con unas notas aromáticas muy marcadas por el tabaco y la pimienta blanca, ambos de buena calidad.

El post gusto sencillo, sin alteraciones, ni sorpresas, con dulzura al final que nos proporciona la fruta roja madura, gracias principalmente a la fresa.

Que podemos decir de este vino,  yo creo que podemos diseccionarlo en dos partes. En una primera parte la fase visual y olfativa se nos presenta con un vino muy expresivo, alegre, fresco y muy aromático, que nos seduce y atrae. Y por otro lado, la boca se queda corta, la sensación es que algo se ha perdido por el camino como la falta de potencia alcohólica y unos taninos casi sin rostro.

Puerto Alicante 2018 pertenece a la D.O.P Alicante, elaborado por Bodegas Vicente Gandia, es un monovarietal de Shiraz, criado en barricas de roble americano procedente de los bosques de Missouri, durante 7 meses.

Si hablamos de maridaje, creo que el ideal en este caso seria, como primera opción pasta fresca al huevo al Pesto Genovés, bien una ensalada típica catalana como es la Esqueixada de Bacallà o una Merluza en Palidote con verduras de la Huerta Valenciana.