Acierto y mucho que ofrecer

Quizás, a día de hoy, es la Denominación de Origen con más seguidores de España! La Ribera del Duero nos ofrece naturaleza, patrimonio y gastronomía. Pero si hablamos de vinos estamos frente a una oferta espectacular, con la variedad Tinto del País al frente como la gran protagonista.

Esta D.O. empezó su andadura el 23 de Julio de 1980, con su primera acta, pero fue el 21 de Julio de 1982, cuando el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación otorgó a la Ribera del Duero la Denominación de Origen y aprobó su primer Reglamento.

Bañada en todo momento por el rio Duero, recorre las provincias de Burgos, Soria, Segovia y Valladolid, de las cuales destacamos poblaciones como Pedrosa del Duero, La Aguiera, Gumiel de Hizán, Aranda de Duero, La Horra, Peñafiel, Valbuena de Duero y Roa.

Se hablado mucho siempre de la rivalidad de la Ribera del Duero y la Rioja, por la supremacía de los vinos en España, pero sí que es cierto, que dese mi humilde opinión y experiencia, la Ribera ha sabido llegar a un público muy joven, con una lectura perfecta de sus necesidades, buscando vinos jóvenes, afrutados, frescos y fáciles de maridar, con una cocina cada día menos elaborada, más económica y fácil de comprender. Un movimiento abanderado siempre por el concepto de los Robles, vinos jóvenes con un leve paso por barrica, que les proporcionan ese justo afinamiento, y el punto de seriedad, para presidir una amplia y diferenciadora posibilidad de ágapes.

Pero la Rioja no se ha quedado atrás, hay bodegas que han sabido reaccionar, rompiendo con el tópico de vinos bajos de color, notas aromáticas más secantes que ofrece la barrica de roble Americano, y elaborando vinos con notas de color cereza picota y aromáticamente la fruta roja fresca.

Si hablamos de gastronomía como no, el Cordero lechal aparece en todas y cada una de nuestras ofertas gastronómicas, así como los quesos, las setas de temporada, … y como no, algo tan nuestro como el tapeo, acompañado de una buena copa de vino, alrededor de na mesa con amigos.

En definitiva, cuando hablamos de la Ribera del Duero, lo hacemos de vinos, de gastronomía, de cultura, de naturaleza,… os invito a que nos perdáis la oportunidad de conocer una región en que la que el vino está rodeado de espacios y sensaciones maravillosas, un espacio para soñar y sentir la viña y el vino muy cerca.